Mensaje
del Bambou Yachting.
Hoy
hace una semana que partimos de Cádiz.
Hemos recorrido unas 1000 millas en rumbo directo y unas 1100
reales, sumando los bordos.
En esta semana hemos vivido multitud de experiencias y situaciones.
La más triste
ha sido la enfermedad de uno de nuestros tripulantes, nada grave
pero que por prudencia se desembarcó en Lanzarote, teniendo
la oportunidad de sustituirlo por uno de los amigos que habían
mostrado interés en venirse pero que inicialmente, por
una cuestión obvia de espacio no podía venir y que
en 24 horas pudo organizarse llegar a dicha isla.
De las más gratas,
sabernos ganadores de la regata de la Bahía de Cádiz.
Lo cual nos subió mucho la moral.
Moral que nos vino
muy bien para afronta la galerna que padecimos durante los primeros
días de la regata.
En el segundo día
avistamos al VSD, al que fuimos a su encuentro al darnos cuenta
de que le faltaba el palo. Estuvimos con ellos durante un rato
hasta asegurarnos todos que tenían la situación
bajo control. Fue un verdadero placer poder estar con ellos y
haber sido aunque sea de ayuda moral. Pues tal como tenían
la situación demostraron tener muchas tablas marina. Probablemente
estuvimos en esta maniobra alrededor de una hora.
Nuestra estrategia
está siendo muy conservadora dado que nuestro barco es
un crucero y para nada regatero. Decidimos bajar hacia la autopista
de los alisios por una vía intermedia, para economizar
millas, dadas las características del barco.
Hemos tenido alguna
punta de 15 nudos, que para un barco con 2 hélices con
3 palas fijas y con un mini spi de 90 metros sin tangón,
es SUPER. Lamentamos nuestro precario rating de solo 4% mejor
que el de nuestro mas directo competidor , pero lo aceptamos deportivamente,
puesto que nuestra ilusion es cruzar el Atlántico entre
amigos y competir al máximo de nuestras posibilidades,sin
perder en el ambiente que reina en el barco.
Nos animó mucho
que tuvimos el spi izado durante 2 días seguidos.
En el barco la moral
del equipo es muy alta, con una gran compenetración entre
todos. Con unas comidas de restaurante Michelin a cargo de nuestro
chef Fernando que nos hace las delicias 5 veces al día.
Que a veces nos lleva a preguntamos ¿estamos en un barco
y en una regata?.
La pesca fenomenal,
aunque arrancó con fuerza y en los últimos días
ha flojeado. Y como no mejore, tendremos "problemas"
de abastecimiento dado que confiábamos con la pesca. Hoy
hemos navegado un buen rato con un grupo muy grande de delfines;es
increíble verlos navegar a grandes velocidades y juguetear
con la proa del barco y las olas.
Quisiéramos
agradecer muy especialmente a Pyrénées (Andorra)
y a NCR por los equipos de agua que tan magnífico papel
nos hicieron sobre todo en los días de galerna. Y a la
empresa de charters de catamaranes Bambou Yachting por habernos
facilitado el catamarán en el que estamos participando
en esta aventura.
Nos mueve una enorme
ilusión y un magnífico ambiente amenizado por nuestro
guitarrista particular Jordi Moya que ya ha compuesto en esta
travesía el Rock Bambou y el Bolero Libérame de
las Guardias.
Esperamos llegar a
Santo Domingo en 15 a 18 días.
Seguiremos informando.
Pero para aquellos que deseen estar al día disponemos de
una web www.andornet.ad/bambou-yachting en la que disponemos de
un "Cuaderno de Bitácora" en el que damos información
diaria de nuestras vivencias a bordo.
Jorge
Molina y la tripulación del Bambou Yachting